Señor mío y Dios mío, he decidido hacer una pequeña pausa en mis
actividades, para acercarme hasta Ti con un corazón esperanzado y
agradecido; Tú eres un Dios bueno, amoroso y que has derramado muchas
bendiciones en mi vida.
Gracias Señor por la salud que me sustenta, por la felicidad que llena mi
alma y por todo el bienestar que me rodea, gracias también por tu
incesante guía e incondicional apoyo.
Hoy, con humildad y confianza, traigo ante Ti mi más sincera intención.
Deseo ser una persona abundante en todas las áreas de mi vida, siguiendo tu
voluntad divina.
Te suplico que me guíes hacia la auténtica abundancia, aquella que proviene
de vivir en armonía contigo y con los demás.
Por favor bendíceme para que pueda vivir cada día con vitalidad y energía.
Lléname de calma y bienestar, permitiendo que tu luz brille a través de mí,
irradiando positividad hacia aquellos que me rodean.
Padre celestial, te ruego que me guíes hacia una abundancia económica que
trascienda lo material, para que pueda ser un canal de bendiciones para los
demás. Ayúdame a administrar con sabiduría los recursos que me has confiado,
utilizando mis dones y talentos para impactar positivamente en la vida de
quienes me necesitan.
En este camino de crecimiento y plenitud, te pido también, Dios compasivo,
que me muestres cómo puedo ser un instrumento de tu amor en el mundo.
Ayúdame a superar los desafíos con confianza y a celebrar cada logro con
humildad, reconociendo que todo lo que tengo proviene de Ti.
Señor, te agradezco por las oportunidades que se presentan ante mí, y
reconozco que cada desafío es una ocasión para crecer y aprender. Con tu
gracia, superaré cualquier obstáculo en mi camino hacia la plenitud.
Amado Dios, con un corazón lleno de gratitud y esperanza, me despido
sabiendo que mi fe en Ti es mi mayor fortaleza. Gracias por escuchar mis
palabras y por abrazar mis sueños con tu gracia infinita, Amén.
Hacer esta bella oración te permitirá acercarte a Dios para darle gracias por todas las cosas buenas que Él hace en tu vida y pedirle al Señor
por una autentica abundancia en salud, felicidad, bienestar y por supuesto,
abundancia económica.
Dios amoroso y generoso, te agradezco por todas las bendiciones en mi vida:
salud, felicidad y bienestar. Anhelo una auténtica abundancia, guiado por
ti, donde mi prosperidad sea compartida. Ayúdame a superar desafíos, a ser
un faro de tu amor y a encontrar oportunidades para crecer. Mi fe en ti es
mi fuerza. Amén.
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