Amado Dios, en esta mañana me refugio en tu presencia, confiando en tus
promesas y en el amor que me cubre y me protege. Hoy declaro con fe las
palabras del Salmo 91:
El que habita al abrigo del Altísimo, morará bajo la sombra del
Omnipotente.
Señor, hoy pongo este día en tus manos y te pido que derrames sobre mí y
sobre mi familia bendiciones abundantes. Guíame por caminos de bienestar,
abre puertas de oportunidad y concédeme triunfos en todo lo que haga.
Permíteme avanzar con seguridad, sabiendo que tu luz me guía y tu gracia me
sostiene. Sé mi escudo y mi refugio en cada paso que dé, protégeme de todo
mal y de toda adversidad.
Padre Celestial, hoy declaro con fe que ningún peligro me tocará, porque Tú,
mi Dios, has enviado a tus ángeles para que me guarden en todos mis caminos.
No temeré a la oscuridad, ni a las dificultades, porque confío en que tu
poder me libra de todo mal. En cada decisión que tome, en cada paso que dé,
en cada palabra que pronuncie, que sea tu voluntad la que se cumpla en mi
vida.
Señor, bendice este día con milagros, con alegría, con amor y con éxito. Que
todo lo que emprenda prospere bajo tu bendición. Dame fuerzas para enfrentar
cada desafío con fe y convicción. Llena mi corazón de paz y mi mente de
pensamientos positivos.
Amado Dios, hoy me levanto con la certeza de que Tú vas delante de mí,
despejando los obstáculos y allanando mi camino. Gracias, porque sé que tu
presencia me acompaña y que en este día veré tu gloria manifestarse en mi
vida. En el nombre de Jesús, Amén.
Hacer esta bella oración te permitirá orar con las palabras del poderoso
salmo 91 para pedirle al Señor que en este día cuide de ti, de tu familia
y bendiga sus vidas con salud, felicidad, éxitos y milagros.
Amado Dios, en esta nueva mañana me refugio en tu presencia, confiando en
tu promesa del Salmo 91. Por favor líbrame de todo mal, cúbreme con tu
escudo y guía cada uno de mis pasos, Amén.
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